La COVID-19 y la prestación de servicios de salud esenciales en el primer nivel de atención

Abstract

Durante la pandemia de COVID-19, la mayoría de los países de la Región de las Américas tomaron medidas que afectaron el funcionamiento y la continuidad de los servicios de salud. La atención ambulatoria, de urgencia y hospitalaria, así como las unidades de cuidados intensivos, debieron soportar una gran presión. A esto se sumó la mortalidad inicial, antes de la aparición de las vacunas, que causó gran incertidumbre y temor en la población general y en el personal de salud. A fin de hacer frente a las emergencias de salud y los desastres, los países deben recuperar e incrementar su capacidad de respuesta para reabrir los servicios de salud de forma segura para los usuarios y las usuarias. Este proceso implica reorganizarlos, reducir las demoras en la atención de salud, y desplegar intervenciones y estrategias de salud pública orientadas a recuperar la confianza de la población en los servicios. Con este objetivo en mente, es necesario fortalecer la capacidad de respuesta del primer nivel de atención, y generar recursos y capacidades para responder a emergencias futuras. Esta síntesis de evidencia presenta hallazgos y orientaciones a los países sobre la recuperación y la continuidad de los servicios de salud, y ayuda a reflexionar sobre los sistemas de salud de los países; las debilidades, las fortalezas y las oportunidades del modelo de atención; la organización y la gestión de los servicios de salud; el financiamiento y la sostenibilidad; el desarrollo de los recursos humanos y tecnológicos; y las comunicaciones de salud.